El Centro Nacional de Gestión de la Defensa de Rusia ha anunciado que monitorea los movimientos del Mount Whitney, buque insignia de la Sexta Flota de Estados Unidos, que ha entrado esta misma jornada en las aguas del mar Negro.
Mediante un mensaje difundido el lunes en Twitter, la Marina norteamericana informó de la partida del mencionado navío para tomar parte en las operaciones conjuntas con la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
El presidente ruso, Vladimir Putin, enfatizó el lunes la necesidad de reforzar las defensas aéreas del país euroasiático ante la acumulación de fuerzas del bloque militar occidental y sus aliados cerca de las fronteras de Rusia.
Los sistemas móviles de misiles antibuque Bal y Bastion de la Flota del Mar Negro de la Armada rusa llevaron a cabo el martes un ejercicio militar en dichas aguas para defender las bases navales de un ataque simulado en la zona, según informó la oficina de prensa de la Flota del Mar Negro.
Las relaciones entre Rusia y el Occidente atraviesan un período de gran tensión a tenor de una serie de cuestiones, incluida la situación en Ucrania y la anexión de la estratégica península de Crimea a la Federación Rusa en 2014.
Moscú ha alertado en reiteradas ocasiones que cualquier violación de su territorio provocará una escalada y ha dejado claro que dará una respuesta contundente a cualquier acción provocativa que suponga un peligro para la integridad y la seguridad de las fronteras rusas.
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