La capital de España, Madrid, ha sido escenario de diferentes manifestaciones contra las políticas del Gobierno en el ámbito nacional e internacional.
Cientos de personas asistieron a una marcha convocada por la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT). Arremetieron contra el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y su ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, por haber derogado la política de dispersión de presos de la organización separatista del País Vasco (ETA) y la falta de medidas para frenar los homenajes a los asesinos de la banda.
De igual manera, unas 2000 personas se congregaron frente a la sede del Ministerio de Asuntos Exteriores en Madrid. Protestaron contra el giro del Gobierno sobre el Sáhara Occidental. El Ejecutivo de Sánchez apoyó la semana pasada la fórmula propuesta por Marruecos para dar un nuevo estatus a la antigua colonia española.
Las protestas de este sábado culminan una semana caliente para el Gobierno español, que también está bajo críticas por los altos costos de los combustibles y la escasez de productos.
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