• El ministro de Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez Parrilla.
Publicada: sábado, 6 de enero de 2024 1:31
Actualizada: sábado, 6 de enero de 2024 1:55

Cuba afirma que EE.UU. con sus informes unilaterales sobre terrorismo, derechos humanos y libertad religiosa busca justificar el bloqueo inhumano impuesto a la isla.

El ministro de Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez Parrilla, ha fustigado este viernes a la Administración estadounidense por mantener por un año más a la nación caribeña en la llamada lista de países que participan o toleran las violaciones contra la libertad religiosa.

“Reiterada inclusión de Cuba en informes unilaterales de terrorismo, derechos humanos y libertad religiosa de Gobierno de Estados Unidos no está vinculada con desempeño ejemplar de nuestro país. Responde a necesidad de justificar sus medidas inhumanas de cerco y guerra económica contra el pueblo cubano”, ha expresado el jefe de la Diplomacia cubana en su cuenta oficial de la red social X.

Por su parte, el vicecanciller cubano, Carlos Fernández de Cossío, ha acusado a Washington de “hipocresía” en materia de la libertad religiosa, denunciando el apoyo de Estados Unidos a la agresión genocida y racista de Israel contra la Franja de Gaza.

 

“Con su habitual hipocresía y con las manos manchadas de sangre por la complicidad racista y criminal en el genocidio israelí contra los palestinos, el Gobierno estadounidense acusa a Cuba de violar los derechos religiosos”, ha criticado Fernández de Cossío en su cuenta de X, exigiendo el “cese inmediato del genocidio en Gaza” y la liberación de Palestina.

Cuba ha dejado claro una y otra vez que EE.UU., siendo el principal patrocinador de terrorismo, y violador de los derechos humanos y de otros derechos fundamentales, no tiene autoridad moral para hablar en estas materias ni juzgar a otros países.

La mayor de las Antillas es objetivo de un bloqueo inhumano impuesto desde hace 65 años por el entonces presidente norteamericano John F. Kennedy para asfixiar a los habitantes de la Isla. El cerco fue una respuesta a la Revolución Cubana (1959) que derrocó a un régimen sumiso a EE.UU. y estableció un gobierno independiente.

Las autoridades cubanas creen que el bloqueo es un acto de guerra económica aún en paz y señalan que más del 80 % del pueblo cubano solo ha vivido bajo las sanciones unilaterales de Estados Unidos.

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