En Brasil, los aspirantes a ocupar el Palacio de Planalto, continúan en con sus campañas. El Candidato del partido de los Trabajadores, el izquierdista, Luiz Inácio Lula Da Silva, se jactó del surgimiento de líderes progresistas en la región, y aseguró que el pueblo latinoamericano “no quiere más fascistas”.
El exmandatario, que habló en una rueda de prensa con corresponsales extranjeros, alegó que también en el gigante suramericano, el pueblo está cansado del autoritarismo y de un líder como el presidente, Jair Bolsonaro, a quien acusó de desafiar la democracia y todas las instituciones del Estado. Aún con todo, se mostró confiado de que Bolsonaro reconocerá el resultado electoral, pese a sus amenazas anteriores.
Entretanto, Bolsonaro, quien busca conseguir otro mandato de 4 años, rechazó las propuestas de campaña de Lula, al advertir de que sus políticas fiscales podrían elevar aún más el costo de la vida.
El próximo 2 de octubre, más de 156 millones brasileños están convocados a unas elecciones generales, donde elegirán, además del presidente y su vicepresidente, a gobernadores, diputados, senadores y legisladores regionales. Hay 12 candidatos a la presidencia, pero según los sondeos, Lula y Bolsonaro encabezarían la primera ronda electoral.
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