Avigdor Liberman, exministro israelí de finanzas y jefe del partido Yisrael Beytenu (“Israel nuestra casa”), ha reaccionado este domingo a una operación de represalia palestina llevada a cabo horas antes en la entrada del asentamiento ilegal israelí de Tekoa, cerca de la ciudad palestina de Beit Lahm (o Belén), en Cisjordania ocupada.
Un palestino disparó desde un vehículo que pasaba por el cruce de Tekoa e hirió a un colono israelí y a otras dos personas, luego se dio a fuga. Por su parte, el ejército israelí ha informado de la detención de un sospechoso del tiroteo en Beit Lahm.
Liberman ha advertido de que los ataques palestinos de represalia ya no se limitan a la ciudad de Yenín, sino que se han extendido en toda Cisjordania ocupada dada la ausencia de cualquier disuasión israelí.
El ultraconservador, que sirvió también en el pasado como ministro de asuntos militares (2016-2018), ha censurado además al gabinete extremista del primer ministro, Benjamín Netanyahu, por perder el control de situación y llevar los territorios palestinos ocupados a la inseguridad. “El gabinete ha perdido su poder de disuasión y control”, avisa.
Los grupos de Resistencia palestinos han aplaudido la operación en Beit Lahm, considerándola una respuesta legítima a las constantes agresiones de militares y colonos israelíes contra el pueblo palestino y sus santidades religiosas.
Mediante un mensaje, Tariq Salmi, portavoz de la Yihad Islámica Palestina, ha descrito como “heroica” y “legítima” la operación palestina, mientras que el Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS) ha asegurado que nunca se replegará ante las medidas israelíes.
La entidad israelí vive una profunda crisis sociopolítica y de seguridad, primero; por las divisiones internas, agravadas por la polémica reforma judicial de Netanyahu, y segundo; por la derrota ante la Resistencia palestina en Cisjordania, que ha puesto al desnudo la debilidad del régimen.
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