El máximo dirigente del movimiento popular Ansarolá de Yemen, Seyed Abdulmalik Badreddin al-Houthi, informó el jueves que las fuerzas yemeníes apuntarán a los barcos de cualquier empresa relacionada con el suministro o transporte de mercancías a Israel, independientemente de su destino.
Con esta medida, Yemen amplía sus ataques, que inicialmente apuntaban solo a los barcos israelíes y los vinculados al régimen con destino a los territorios ocupados palestinos.
“Cualquier barco de cualquier compañía involucrada en el suministro o transporte de mercancías al enemigo (israelí) y a cualquier destino será un objetivo. Cualquier barco que transporte mercancías a puertos enemigos será un objetivo para nosotros dondequiera que nuestras manos lleguen”, declaró el número uno de Ansarolá.
Puso de relieve que Yemen, cuando toma una decisión en un momento determinado, significa que tenemos la capacidad para implementarla.
Dijo que se trataba de la cuarta etapa de las operaciones que viene realizando Yemen en represalia por la agresión israelí a la Franja de Gaza y que este periodo inicia con los ataques del régimen sionista a la ciudad de Rafah, en el sur del enclave palestino.
“A partir de ahora, también estamos pensando en la quinta y sexta etapa, y tenemos opciones muy importantes, sensibles e influyentes sobre los enemigos”, subrayó Al-Houthi.
Las fuerzas yemeníes han apuntado con 606 misiles balísticos y drones 107 barcos israelíes, estadounidenses y británicos en el mar Rojo, el estrecho de Bab al-Mandeb, el golfo de Adén y recientemente en el océano Índico durante las operaciones realizadas semanas después del inicio, el 7 de octubre, de la guerra genocida del régimen sionista contra Gaza.
Desde el noviembre pasado, Yemen puso en marcha operaciones militares contra barcos de Israel o vinculados al régimen sionista en el mar Rojo, en un intento de cortar las vías de suministro de Israel y forzarlo a poner fin al genocidio que lleva a cabo en Gaza, donde ha matado a cerca de 34 800 palestinos.
Poco después, Yemen puso también como blancos legítimos a embarcaciones de Estados Unidos y el Reino Unido, argumentando que estos países encabezan una coalición que lleva a cabo ataques al territorio yemení en apoyo a Israel.
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