El ataque estadounidense con 59 misiles Tomahawk a la base aérea de Al-Shairat, en la provincia central siria de Homs, ha animado al grupo takfirí EIIL (Daesh, en árabe) a reanudar sus ataques a Palmira, en la misma provincia, según ha informado este viernes la cadena libanesa de noticias Al-Mayadeen.
Citando a su corresponsal en Moscú (capital rusa), el canal recuerda que la base casi destruida por completo, era el principal centro de apoyo a las operaciones del Ejército sirio para la liberación de Palmira de manos de Daesh.
Actualmente, ha añadido, los terroristas no ven obstáculo alguno para lanzar ataques contra los civiles sirios y destruir el patrimonio histórico del país en Palmira.
El presidente de EE.UU., Donald Trump, ordenó el ataque a la base siria sin la autorización del Congreso de su país, so pretexto de ser el lugar desde donde se lanzó el pasado martes un supuesto ataque químico a la ciudad de Jan Sheijun, con un saldo de 86 muertos.
El ataque ha recibido el apoyo total de la oposición siria, el régimen de Israel, Arabia Saudí y Turquía, entre otros países, mientras que el presidente de Rusia, Vladimir Putin, lo ha denunciado como agresión a una nación soberana.
A principios del pasado mes de marzo, el Ejército sirio logró, apoyado por Rusia, recuperar por segunda vez el control de Palmira, declarada Patrimonio de la Humanidad por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco, por sus siglas en inglés), y expulsar a los terroristas de la zona.
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