• Cazas F-16 de la fuerza aérea del régimen de Israel.
Publicada: jueves, 6 de octubre de 2016 7:32

El despliegue de misiles rusos S-300 en el puerto de Tartus, oeste de Siria, debilitará la capacidad de amenaza de Israel contra el Ejército sirio y Hezbolá.

“El despliegue del sistema antiaéreo S-300MV o SA-23 Gladiator en Siria es una mala noticia para Israel porque puede derribar aviones en el espacio aéreo y marítimo (de los territorios ocupados) o cuando ataquen blancos en Siria o El Líbano”, informó el miércoles el diario israelí Yedioth Aharonot.

El rotativo hace referencia a la preocupación del servicio de seguridad del régimen israelí respecto a las futuras operaciones de la fuerza aérea israelí sobre Siria y El Líbano, tras el despliegue de los sistemas rusos en Siria que, a su vez, podría "aumentar indirectamente el poderío de Irán" y del Movimiento de la Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá) en la zona.

El despliegue del sistema antiaéreo S-300MV o SA-23 Gladiator en Siria es una mala noticia para Israel porque puede derribar aviones en el espacio aéreo y marítimo (de los territorios ocupados) o cuando ataquen blancos en Siria o El Líbano”, informó el diario israelí Yediot Aharonot.

El martes, el Ministerio de Defensa de Rusia anunció que había instalado sistemas antimisiles S-300 en Siria a fin de garantizar la seguridad de su base marítima militar en Tartus y de los buques de la Armada rusa. Posteriormente, EE.UU. expresó su descontento por la medida rusa y advirtió de que vigilaría de cerca la zona para asegurar la seguridad de sus cazas que realizan operaciones en Siria bajo en el marco de la coalición anti-EIIL (Daesh, en árabe).

 

Por su parte, el periódico israelí Walla en su edición digital comentó que la decisión rusa de desplegar sistemas S-300 en Siria cambia las reglas del juego porque restringirá “la libertad de la fuerza aérea israelí en el espacio aéreo sirio”.

El servicio de seguridad de Tel Aviv, prosiguió el diario, cree que este despliegue incrementará la confianza del presidente sirio, Bashar al-Asad, y llevará a Israel a pensárselo dos veces antes de realizar más acciones hostiles contra Siria.

El régimen de Tel Aviv, recientemente, ha realizado nuevos ataques aéreos contra posiciones del Ejército sirio en los altos de Golán. Según denuncian las autoridades de Damasco, estas incursiones tienen como objetivo debilitar a las fuerzas sirias, dado que hay evidencias de la cooperación entre el régimen israelí y grupos terroristas como Frente Fath al-Sham (anterior Frente Al-Nusra), que luchan para derrocar al Gobierno de Siria.

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