Bajo enormes medidas de seguridad, Israel reabre la explanada de las Mezquitas, en la Ciudad Vieja de Al-Quds. Fue cerrada por 48 horas, tras el choque que dejó tres palestinos y dos soldados israelíes muertos. Ahora, los palestinos tienen que pasar por detectores de metales para poder entrar.
Muchos de los musulmanes decidieron rezar fuera de la mezquita, en protesta contra las nuevas medidas de seguridad. El director sheij Omar al-kiswani del recinto denuncia la violación de régimen de Tel Aviv al “statu quo” de la explanada.
La reapertura de la mezquita se realiza tras numerosas protestas, tanto en Palestina, como en otros países, aunque solo de manera parcial. Aún siete de las nueve puertas de acceso al lugar, permanecen cerradas.
Por si fuera poco, los ministros israelíes dieron la aprobación inicial a un proyecto de ley que busca dificultar la entrega de las partes palestinas de la ciudad de Al-Quds como parte de un futuro acuerdo de paz.
La iniciativa, propuesta por una miembro de extrema derecha del parlamento, dicta que cualquier cede de tierras de Al-Quds, deberá ser aprobada por una mayoría de dos tercios del parlamento israelí. Los promovedores de la ley dicen que así salvaron a Al-Quds de ser dividida.
Los palestinos ven la parte oriental de la ciudad como la capital de su futuro Estado. El proyecto de ley pondrá en peligro la solución de dos Estados al conflicto palestino-israelí.
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