Se trata de los productos construidos en los asentamientos israelíes en la Cisjordania, Al-Quds, (Jerusalén) y los altos de Golán, todos ocupados y anexionados por el régimen de Israel tras la guerra de junio de 1967. La normativa internacional nunca los consideró parte de Israel.
"Israel lamenta que justo Francia, donde hay una ley contra el boicot, fomente estas medidas, que pueden ser interpretadas como un espaldarazo a grupos radicales y al movimiento de boicot contra Israel", reza un comunicado emitido el jueves por la cancillería israelí.
Israel lamenta que justo Francia, donde hay una ley contra el boicot, fomente estas medidas, que pueden ser interpretadas como un espaldarazo a grupos radicales y al movimiento de boicot contra Israel", reza un comunicado emitido por la cancillería israelí.
Francia hizo públicas ayer jueves las nuevas regulaciones para el etiquetado de los productos de las colonias israelíes en territorio ocupado, de acuerdo a una decisión de la Unión Europea de noviembre de 2015.
Las autoridades francesas dijeron que es necesario marcar claramente el envase para no engañar a los consumidores. Las mercancías procedentes de territorios palestinos ocupados deben estar marcadas, por ejemplo, como originarias de la ocupada "Cisjordania" y, a continuación, entre paréntesis, el paquete también debe estar etiquetado de que procede de "un asentamiento israelí".
Muy indignado por esta decisión, el régimen israelí acusó al país galo de tener un “doble estándar” al implementar las regulaciones del bloque comunitario, ignorando los 200 conflictos territoriales que están teniendo lugar hoy en todo el mundo.
Israel siente profunda preocupación por el gran apoyo mundial al movimiento antisraelí Boicot, Desinversión y Sanciones (BDS), que sigue ganando cada vez más adeptos a nivel internacional. El BDS tiene como objetivo aumentar la presión económica y política sobre Israel para poner fin a la ocupación y la colonización de tierras palestinas.
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