• Una prueba de un misil de largo alcance del Ejército de EE.UU.
Publicada: miércoles, 27 de marzo de 2019 7:07
Actualizada: miércoles, 27 de marzo de 2019 10:10

El Ejército de EE.UU. da prioridad a desarrollar su capacidad de misiles de largo alcance para perseguir objetivos marítimos, según un informe.

“El futuro programa de misiles de largo alcance del Ejército estadounidense se centra en destruir objetivos marítimos desde tierra una vez que se establezca una versión de referencia”, dijo el coronel John Rafferty, quien está a cargo del desarrollo del programa del servicio de cohetes de largo alcance del Departamento de Defensa de EE.UU. (el Pentágono).

En una entrevista publicada el martes por el portal Defense News, Rafferty señaló que el Ejército estadounidense además planea aumentar la capacidad letal de los citados misiles para que su efectividad sea aun mayor a sus predecesores.

En este contexto, el alto rango militar dejó claro que la prioridad de este proyecto se basa en la capacidad de atacar objetivos marítimos y a cualquier blanco que emita señales de detección, como podrían ser, radares o buques.

El futuro programa de misiles de largo alcance del Ejército estadounidense se centra en destruir objetivos marítimos desde tierra una vez que se establezca una versión de referencia”, dice el coronel John Rafferty, quien está a cargo del desarrollo del programa del servicio de cohetes de largo alcance del Pentágono.

 

El desarrollo de la capacidad de misiles de largo alcance toma su importancia en un mayor grado en las misiones de la Marina estadounidense desplegada en el océano Pacífico, sostuvo el militar.

En esta tesitura, aclaró que hay una demanda por parte de los comandos del Pacífico para poder afrontar objetivos marítimos desde tierra, en alusión a los posibles blancos de los navieros de combate chino en patrulla en las disputadas aguas del mar de China Meridional.

Este anuncio de mejora de misiles de largo alcance se produce en medio de las críticas que recibe EE.UU. por su decisión de abandonar el Tratado de Fuerzas Nucleares de Alcance Intermedio (INF, por sus siglas en inglés), suscrito en 1987 entre EE.UU. y la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS).

Son muchos los países que alertan que este retiro favorecerá una nueva carrera armamentística entre las grandes potencias armamentísticas como lo son EE.UU., Rusia y China y, por consiguiente, dará lugar a nuevos focos de tensión entre estas naciones.

krd/ktg/mjs