“Los extranjeros que hubieren visitado Irán, Irak, Siria o Sudán después del 1 de marzo de 2011, no podrán viajar a EE.UU. sin visado (…) Los viajeros de dichas categorías ya no podrán viajar ni ser admitidos en EE.UU. en virtud del Programa de Exención de Visa (VWP, por sus siglas en inglés)”, reza un comunicado emitido este jueves por el Departamento de Seguridad Nacional de EE.UU.
Los extranjeros que hubieren visitado Irán, Irak, Siria o Sudán después del 1 de marzo de 2011, no podrán viajar a EE.UU. sin visado (…) Los viajeros de dichas categorías ya no podrán viajar ni ser admitidos en EE.UU. en virtud del Programa de Exención de Visa (VWP, por sus siglas en inglés)”, reza un comunicado emitido el jueves por el Departamento de Seguridad Nacional de EE.UU.
Se añade que los ciudadanos de los 38 países beneficiarios del programa, en su mayoría europeos, deberán enviar información biográfica al Sistema Electrónico de Autorización de Viaje (ESTA), y que las autorizaciones a los solicitantes del ESTA serán aprobadas “caso por caso”.
Los viajeros a quienes se deniegue el viaje sin visa seguirán podiendo solicitar el visado a través de una embajada estadounidense en sus países, señala el comunicado.
Por otro lado, el Departamento desvela que Washington hará ciertas excepciones, en número limitado, en casos de viajes o misiones de carácter diplomático o militar, siempre y cuando tengan lugar en el marco de las leyes y los intereses de EE.UU.
El comunicado apunta además que se han introducido ciertas modificaciones a la ley, en comparación con la versión original aprobada por las autoridades del país norteamericano, con el fin de armonizarla con el Plan Integral de Acción Conjunta (JCPOA, por sus siglas en inglés).
Las excepciones, considera, benefician a los individuos que hayan viajado a Irak o a Irán a partir de 14 de julio de 2015 con fines “legítimos” relacionados con negocios.
También se podrán acogerse a excepción los periodistas y cooperantes que viajen a Irán, Irak, Sudán o Siria para actividades de ayuda humanitaria, así como los miembros de organizaciones internacionales, regionales o gubernamentales en misión oficial.
Sin embargo, indica el Departamento, estas excepciones no incluirán a los individuos que compartan la nacionalidad iraquí, siria, iraní o sudanesa con alguna de las de los 38 países del programa VWP, aunque el Gobierno “continuará explorando” cómo pueden acogerse a exenciones de visados los sujetos con doble nacionalidad.
El pasado 8 de diciembre y so pretexto de evitar posibles ataques del grupo terrorista takfirí EIIL (Daesh, en árabe), los legisladores de la Cámara de Representantes de EE.UU. dieron luz verde a un proyecto legislativo para denegar la entrada sin visado a suelo estadounidense a personas que hayan viajado a alguno de varios países, incluidos Irán, Siria e Irak.
El día 18 del mismo mes, el Congreso de Estados Unidos aprobó un acuerdo presupuestario para dotar de fondos al Gobierno Federal durante el año fiscal 2016. Los demócratas interpretan como una victoria haber impedido la introducción en el paquete legislativo de criterios aún más restrictivos defendidos por los conservadores.
El presidente de EE.UU., Barack Obama, firmó al día siguiente el proyecto de ley presupuestaria de 2016, aprobando en el mismo acto las nuevas restricciones al Programa de Exención de Visado.
El VWP permite a los ciudadanos de ciertos países viajar sin visado a EEUU para un período no superior a los 90 días por motivos de turismo o negocios.
El día 20 de diciembre, el canciller iraní, Mohamad Yavad Zarif, calificó como “absurdas” las nuevas restricciones de EE.UU. a su Programa de Exención de Visado, y recordó que contradicen los compromisos adquiridos por Washington en virtud del JCPOA.
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