Un grupo de manifestantes provocó algunos incidentes y se enfrentó con efectivos de la policía de Buenos Aires cuando terminaba una movilización en repudio a la cumbre de la Organización Mundial del Comercio (OMC).
Campesinos, trabajadores, activistas, estudiantes, feministas, pueblos originarios tomaron las calles de la capital argentina con banderas y consignas en las que se podía leer la OMC mata, mientras se escuchaban arengas como ‘alerta, alerta que camina la lucha campesina por América Latina’.
La protesta fue organizada por Confluencia Fuera OMC, una plataforma que agrupa un centenar de organizaciones no gubernamentales que encabezan una jornada de acción dentro de la Cumbre de los Pueblos, con marchas, festivales y foros-debates.
En la marcha estuvieron presentes referentes como el Premio Nobel de la Paz argentino Adolfo Pérez Esquivel y Nora Cortiñas, de Madre de Plaza de Mayo-Línea Fundadora.
(...) en el marco de la OMC y frente a la protesta organizada el día de hoy martes, donde participaron alrededor de 2.500 manifestantes, un pequeño grupo de 50 personas, encapuchados con piedras, facas y bombas molotov, intentaron acciones violentas y fueron inmediatamente dispersos y detenidos. Hasta el momento fueron 6 los detenidos”, informa el Ministerio de Seguridad de Argentina.
En un comunicado, el Ministerio de Seguridad de Argentina aseguró que “en el marco de la OMC y frente a la protesta organizada el día de hoy martes, donde participaron alrededor de 2500 manifestantes, un pequeño grupo de 50 personas, encapuchados con piedras, facas y bombas molotov, intentaron acciones violentas y fueron inmediatamente dispersos y detenidos. Hasta el momento fueron 6 los detenidos”, concluye el comunicado.
La 11º Conferencia Ministerial de la Organización Mundial del Comercio se desarrolla desde el domingo en Buenos Aires, capital argentina, bajo un estricto operativo de seguridad en la zona de Puerto Madero y el microcentro, con restricciones para el acceso de vehículos y peatones.
El Gobierno de Mauricio Macri denegó la participación en la conferencia a 63 representantes de 18 organizaciones no gubernamentales internacionales, lo que dio pie a quejas y pedidos de revisión de varios países.
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