“Ahí van los enemigos de Nicaragua, recorriendo la misma autopista intervencionista por la que se estrellaron contra la soberanía del pueblo venezolano”, ha alertado este domingo el actual ministro del Poder Popular para Industrias y Producción Nacional del país bolivariano a través de su cuenta en Twitter.
No obstante, el titular venezolano ha asegurado que esta táctica está condenada al fracaso y no lograrán nada: “Fórmula errática y fallida. ¡No pasarán!”, ha enfatizado.
Arreaza ha reaccionado de este modo los comentarios del director de la división de las Américas de Human Rights Watch (HRW), José Miguel Vivanco, quien ha calificado de “farsa” las elecciones generales que se han celevrado este domingo en Nicaragua.
Estados Unidos, Europa y las campañas de difamación han aumentado sus presiones contra el Gobierno de Nicaragua desde que Ortega se postulara para la reelección en las presidenciales en las cuales el mandatario buscará su quinto mandato, el cuarto consecutivo (desde su victoria en 2006) y el segundo, junto a su esposa, la vicemandataria Rosario Murillo.
De acuerdo con analistas, la razón por la que el líder sandinista es blanco de tantas críticas y ataques es por su compromiso con defender la soberanía de Nicaragua y preservar los intereses del país centroamericano.
Este domingo, los nicaragüenses acudieron a las urnas para elegir a su nuevo mandatario, así como, a 90 diputados de la Asamblea Nacional (Congreso unicameral) y 20 diputados del Parlamento Centroamericano (Parlacen).
Los centros de votación ya han cerrado sus puertas a las 18:00 hora local y ha comenzado el conteo de los sufragios, tras un proceso electoral caracterizado por la masiva participación ciudadana.
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