En el encuentro, que se mantuvo el miércoles al margen del 77.º periodo de las sesiones de la Asamblea General de Naciones Unidas (AGNU) y bajo el formato de Astaná, estuvieron presentes los cancilleres de Irán, Hosein Amir Abdolahian; de Rusia, Serguéi Lavrov; de Turquía, Mevlut Cavusoglu; y el enviado especial de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para Siria, Geir Pedersen.
Astaná es una iniciativa que elaboraron los tres países con la espera de una solución al conflicto en Siria, país que desde 2011 ha sido el escenario de una crisis orquestada por los terroristas apoyados por EE.UU., el régimen de Israel y sus aliados occidentales y regionales.
En 2017 nació el proceso de Astaná, con Irán, Rusia y Turquía como garantes, celebrando así su primera ronda de diálogos. Por sus esfuerzos, se han logrado crear varias zonas de desescalada en Siria.
La última cumbre tripartita se realizó el pasado 19 de julio en Teherán, la capital iraní, con la presencia de los presidentes de Irán, Turquía y Rusia.
La cumbre de Teherán cerró con énfasis en la necesidad de preservar la integridad territorial de Siria y combatir el terrorismo en todas sus formas y manifestaciones.
hnb