El enviado especial del mandatario ruso para Siria, Alexander Lavrentiev, afirmó que, si la oposición siria busca un cambio de gobierno mediante la redacción de una nueva Constitución, no irá a ninguna parte.
“Si alguien persigue el objetivo de crear una nueva Constitución con el fin de cambiar los poderes del presidente sirio y, por lo tanto, cambiar el Gobierno en Damasco, este camino no conducirá a ninguna parte”, señaló Lavrentiev, en una entrevista con la agencia rusa de noticias TASS.
El funcionario ruso destacó que, si la oposición realmente cree que se requieren algunos cambios, entonces, debería presentar propuestas concretas para someterlas a votación, ya sea mediante referéndum o por cualquier otro medio, y no permitirse entrar en especulaciones que indiquen que no puede haber cambios, mientras que Al-Asad esté en el poder.
Asimismo, culpó a la oposición por el retraso y los problemas provocados en el proceso de negociación con el Gobierno de Siria, diciendo que no es correcto culpar siempre al Gobierno y que las partes deben ser conscientes de sus responsabilidades.
Siria vive desde marzo de 2011 un conflicto en el que las fuerzas gubernamentales se enfrentan a facciones armadas de la oposición y a grupos terroristas que, conforme a las autoridades sirias, reciben apoyo de algunos países occidentales y regionales, encabezados por EE.UU. Sin embargo, el Ejército sirio y sus aliados lograron frustrar todos esos planes e impulsar una solución política tras haber recuperado la mayor parte del territorio nacional.
Entretanto, el Gobierno y la oposición de Siria, con la mediación de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), acordaron el pasado octubre redactar una nueva Constitución del país árabe. La iniciativa para elaborar una nueva Carta Magna para Siria se lanzó hace dos años, pero las reuniones previas sin mediación de la ONU no habían logrado resultados concretos.
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