• Los tanques K1A2 del Ejército de Corea del Sur durante un ejercicio militar con las fuerzas estadounidenses, 26 de abril de 2017.
Publicada: jueves, 1 de febrero de 2018 10:56
Actualizada: jueves, 1 de febrero de 2018 11:37

El embajador de Rusia en Pyongyang, Alexander Matsegora, indicó que investigadores de su país han detectado un aumento significativo del poderío militar de Corea del Norte durante el año pasado, pero advirtió de que el aumento de las sanciones antinorcoreanas de EE.UU. puede derivar en una guerra.

“Se puede decir que los norcoreanos lograron una mejora importante en su programa de misiles durante el año pasado”, señaló el miércoles Matsegora, citando a especialistas rusos.

Los expertos, según el diplomático, consideran que el líder de Corea del Norte, Kim Jong-un, ha aumentado enormemente su poder militar desde que el presidente de EE.UU., Donald Trump, entró en la Casa Blanca el año pasado.

Sin embargo, Matsegora cree que el mandatario estadounidense debe pensarlo dos veces antes de cumplir su promesa de llenar con “fuego y furia” la península de Corea.

En otro momento de sus declaraciones, advirtió de que las persistentes sanciones del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (CSNU) contra Corea del Norte pueden desembocar finalmente en una contienda bélica a gran escala.

“Si se detienen los suministros de petróleo y sus derivados, significaría un bloqueo completo sobre Corea del Norte (…) tal acción se percibiría como una declaración de guerra con todas sus consecuencias”, alertó.

Si se detienen los suministros de petróleo y sus derivados, significaría un bloqueo completo sobre Corea del Norte (…) tal acción se percibiría como una declaración de guerra con todas sus consecuencias”, advirtió el embajador de Rusia en Corea del Norte, Alexander Matsegora.

 

En los últimos meses, la situación en la península coreana ha empeorado por las maniobras militares Seúl-Washington en la zona así como las pruebas de misiles balísticos y de armas nucleares de Pyongyang, cuyas autoridades justifican que son en respuesta a las provocaciones y amenazas de Estados Unidos.

Pyongyang denuncia que Washington intenta agravar las tensiones, incluso en momentos en que las dos Coreas están llevando a cabo diálogos para normalizar sus relaciones bilaterales “sin interferencia exterior alguna”.

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