El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), espera tener en su territorio a dos exfuncionarios y un exgobernador para que respondan por delitos relacionados con la corrupción y malas prácticas administrativas.
Emilio Lozoya Austin, exdirector de Petróleos Mexicanos, regresa extraditado de España con orden de aprehensión en su contra para responder acusaciones por delitos patrimoniales.
Está acusado de recibir y repartir sobornos de las empresas Odebrecht, de Brasil que buscaba contratos en México y de Altos Hornos de México. Lozoya, quien se decía inocente y víctima de persecución política, decidió colaborar con las autoridades judiciales mexicanas. Así lo dijo el 18 de agosto de 2017.
Lozoya Austin, regresa de España con la intención de dar a conocer quienes participaron en la corrupción relacionada con Odebrecht. Llega a México luego de que buscado en varios países del mundo.
Para el presidente de la República, los sobornos relacionados con Odebrecht, tejieron una red de corrupción en México. Pero fue más lejos.
Otra extradición en puerta, es la de Tomás Zerón de Lucio, extitular de la Agencia de Investigación Criminal, que dirigió las indagatorias del caso Ayotzinapa, acusado de obstaculizar la investigación y de César Duarte, exgobernador de Chihuahua, quien fue detenido en MiamI, Florida, acusado de fraude en su entidad.
Las extradiciones de los tres exfuncionarios vendrán acompañadas de información que dejará con mayor nitidez la presunta corrupción que imperó en la pasada administración, según han dicho las actuales autoridades mexicanas.
Arturo Calvillo, México.
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