Además de dejar varios barrios sin agua potable, la fuerte explosión ha dañado gravemente los edificios adyacentes, tal y como han afirmado este martes los medios locales.
Las fuentes han indicado que los hechos se produjeron antes de que las fuerzas iraquíes llegaran al depósito en cuestión.
No es la primera vez que los extremistas takfiríes atentan contra las infraestructuras en Mosul, su último bastión en el norte de Irak. En Siria también, Daesh ha utilizado semejante medida, en un intento por crear protestas populares contra las autoridades de ambos países árabes.
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