Un análisis de datos llevado a cabo en el mayor hospital de París, capital francesa, la Pitié Salpétrière, ha permitido a un equipo de médicos dirigido por el neurobiólogo Jean-Pierre Changeux sacar la conclusión de que la nicotina podría contener propiedades que hagan frente a esta enfermedad.
Tras estudiar los antecedentes de pacientes hospitalizados y pacientes con síntomas leves de la COVID-19, los médicos concluyeron que solo el 5 % de los fumadores estaban contagiados con el virus.
“Presumimos que el receptor de acetilcolina nicotínico desempeña un papel clave en la patofisiología de la infección por el COVID-19 y podría representar un objetivo para la prevención y el control de la infección”, destaca la hipótesis publicada por los médicos franceses.
Con estos resultados basados de momento solo en observaciones de pacientes, los médicos se han propuesto profundizar el estudio con un ensayo clínico que consiste en la distribución de parches de nicotina con diferentes dosis al personal sanitario de manera preventiva, a pacientes hospitalizados para observar si los síntomas de la COVID-19 disminuyen y a pacientes que se encuentran en cuidados intensivos para observar si la inflamación de los pulmones se reduce.
En contraste a esta hipótesis, la Organización Mundial de la Salud (OMS) advirtió hace unas semanas que es muy probable que los fumadores estén más expuestos a la COVID-19 debido a una dolencia pulmonar preexistente o a su capacidad pulmonar, además de que los cigarrillos podrían ser tocados con las manos antes de llevarlos a la boca haciendo más potencial un contagio por el virus.
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