La operación, dirigida por un juez de la Audiencia Nacional, la llevaron a cabo los "Mossos d'Esquadra" —como se conoce a la policía autónoma de Cataluña—, en colaboración con la Policía belga, en el marco de una investigación contra el terrorismo.
Según confirmaron a Efe fuentes cercanas a la investigación, a algunos de los arrestados se les atribuye algún tipo de relación con los detenidos por los atentados de marzo pasado en Bélgica. En los registros de este martes, los agentes han encontrado drogas, armas y se han incautado de abundante material informático.
La investigación comenzó hace ocho meses a partir de informaciones inconexas procedentes de la colaboración ciudadana y de las labores de prevención llevadas a cabo por los Mossos. "No han realizado ningún acto en Cataluña. Son jóvenes de entre 31 y 39 años, con antecedentes, varios vinculados con el tráfico de drogas", ha explicado Josep Lluís Trapero, el máximo responsable de los Mossos d'Esquadra, en declaraciones a TV3.
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