• Artur Mas, presidente regional de Cataluña (noreste de España), interviene en el mitin de fin de campaña de Juntos por el Sí para las elecciones autonómicas, 25 de septiembre de 2015.
Publicada: martes, 29 de septiembre de 2015 14:30

Las principales fuerzas políticas de Cataluña —salvo Ciudadanos y PP— condenan la imputación del presidente de la región, Artur Mas, por organizar en 2014 la consulta independentista del 9-N.

“Estamos ante un nuevo ataque contra las instituciones del país por parte de un Estado demofóbico que utiliza políticamente las instancias judiciales para intentar doblegar la voluntad del pueblo catalán”, afirma el comunicado emitido este martes por la Candidatura de Unidad Popular (CUP).

Estamos ante un nuevo ataque contra las instituciones del país por parte de un Estado demofóbico que utiliza políticamente las instancias judiciales para intentar doblegar la voluntad del pueblo catalán”, ha alertado este martes la Candidatura de Unidad Popular (CUP) de Cataluña, en el noreste de España.

La CUP lanza además una advertencia “al Estado” de que “la desobediencia vivida el 9-N —9 de noviembre, fecha de los actos por los que se ha imputado hoy mismo a Masserá una práctica habitual de ahora en adelante por parte de las instituciones catalanas”. El cabeza de lista de la CUP en Barcelona, Antonio Baños, llamó ya el lunes a la desobediencia.

Aun así, Baños ha reiterado la jornada de hoy, en una entrevista radiofónica, que su organización “no votará sí a un gobierno presidido por Mas”, si bien ha dejado claro que el proceso separatista “no fallará por culpa nuestra”.

El propio gobierno regional, la Generalidad de Cataluña —aún presidido por Mas en funciones—, ha condenado la imputación del dirigente soberanista como “juicio político” a través de su portavoz, Neus Munté. 

Estamos ante un juicio político, ante la instrumentalización política de una querella que presentó la Fiscalía general del Estado, ha afirmado la portavoz del gobierno regional de Cataluña, Neus Munté.

“Estamos ante un juicio político, ante la instrumentalización política de una querella que presentó la Fiscalía general del Estado”, ha dicho Munté, antes de afirmar su “plena convicción de que no se ha hecho nada ilegal”.

La portavoz del gobierno regional ha pedido además respeto a Mas por parte de la CUP y ha instado a que sea reinvestido en el cargo —para lo cual harían falta los votos de la formación asamblearia—.

Neus Munté, portavoz de la Generalidad de Cataluña (noreste de España).

 

En el partido de Mas, Convergencia Democrática de Cataluña (CDC), el exalcalde de la capital catalana, Barcelona, Xavier Trias ha reaccionado a la imputación haciendo “un llamamiento a que estemos unidos”, y ha apuntado que “tenemos que estar preparados para todo”.

Es una muestra de lo importante que es seguir con la hoja de ruta y avanzar en el proceso de independencia”, ha observado el portavoz de Izquierda Republicana de Cataluña (ERC, en catalán), Sergi Sabrià.

Y su formación aliada en la candidatura independentista Juntos por el Sí, Izquierda Republicana de Cataluña (ERC, por sus siglas en catalán), ha condenado también la decisión de la Fiscalía a través de su portavoz, Sergi Sabrià.

“Es una muestra de lo importante que es seguir con la hoja de ruta y avanzar en el proceso de independencia”, ha dicho Sabrià, que ha acusado al Gobierno español de instrumentalizar los tribunales “contra los catalanes”. En España, el Fiscal General del Estado es nombrado a propuesta del Gobierno.

Íñigo Errejón, secretario político y ‘número dos’ de Podemos. 16 de julio de 2015.

 

Por parte de Podemos, el secretario político y ‘número dos’ del partido, Íñigo Errejón, ha calificado de “tremenda torpeza” la imputación de Mas y ha acusado también al Partido Popular (PP), en el Gobierno, de “judicializar aquello para lo que no tiene respuesta política”.

Mas podría ser juzgado por muchas cosas que han perjudicado a la sociedad catalana, pero no por permitirles votar”, ha opinado el secretario político de Podemos, Íñigo Errejón.

“Mas podría ser juzgado por muchas cosas que han perjudicado a la sociedad catalana, pero no por permitirles votar”, ha apuntado Errejón.

Inés Arrimadas, candidata principal del partido Ciudadanos en las elecciones autonómicas de Cataluña (noreste de España). 27 de septiembre de 2015.

 

Ciudadanos, sin embargo —segunda fuerza política catalana tras las elecciones del domingo—, ha tomado distancias respecto a la cuestión. El partido fue fundado en 2006 en Cataluña, en gran medida, para defender la españolidad de la región.

“Hay que separar poderes. No entramos a hacer de jueces, pero cualquier español está sometido al Estado de Derecho, se llame Artur Mas o se llame Albert Rivera”, ha declarado su cabeza de lista en Barcelona en los pasados comicios, Inés Arrimadas.

Hay que separar poderes. No entramos a hacer de jueces, pero cualquier español está sometido al Estado de Derecho, se llame Artur Mas o se llame Albert Rivera”, ha declarado la cabeza de lista en Barcelona de Ciudadanos, Inés Arrimadas.

Más ofensivo se ha mostrado el PP —sexta fuerza política en Cataluña tras las elecciones—. Tanto el candidato local principal, Xavier García Albiol, como la presidenta de la Comunidad Autónoma de Madrid, Cristina Cifuentes, han exigido la renuncia de Mas al cargo que sigue ocupando en funciones.

“Mas ha hecho mucho daño a la sociedad, nos ha fracturado y dividido, y esta imputación es el colofón y la evidencia de una Presidencia que ojalá podamos olvidar”, ha dicho García Albiol.

Artur Mas —al igual que dos altas funcionarias de su administración, el año pasado— está imputado por hacer caso omiso de las resoluciones del Tribunal Constitucional español contra la celebración de una consulta popular sobre una posible secesión de Cataluña respecto de España.

Además del delito de desobediencia, se le imputan al presidente regional delitos de “obstrucción a la Justicia o usurpación de funciones”, “prevaricación administrativa” y “malversación”, cuyas penas previstas, sumadas, podrían conducir a la inhabilitación de Mas para ejercer cargos públicos durante más de 20 años.

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