Mientras tanto en las afueras de la corte, decenas de manifestantes protestaron exigiendo la liberación de la periodista del canal de televisión iraní, Press TV. Activistas no descartan la posibilidad de que Hashemi sea una prisionera política, dado la hostilidad del presidente Donald Trump al Gobierno iraní.
Al mismo tiempo que una corte federal recibía en una nueva audiencia a la periodista de la cadena en inglés Press TV, Marzie Hashemi, una numerosa concurrencia protestaba en las afueras, exigiendo su liberación.
Hashemi, detenida el pasado 13 de enero, oficialmente no ha cometido ningún crimen pero es mantenida en cautiverio, bajo el argumento de ser testigo en otro caso desconocido y sería liberada cuando termine sus declaraciones ante un “Gran Juarado”. Activistas no descartan razones políticas para su detención.
Hashemi ha sido declarada “testigo Material” en un caso no hecho público; sin embargo una fuente del Gobierno le dijo a Reuters que el gran jurado estaba examinando si Press TV es un medio de propaganda, no registrado como agente de un gobierno extranjero.
Preocupa el tiempo por el cual Marzieh Hashemi podría estar detenida. La ley estadounidense contempla que los “testigos materiales” puedan estar privados de libertad, de manera indefinida.
Al filo del cierre de esta entrega, se confirmó la liberación de Marzie Hashemi, tras haber terminado su declaración ante el “Gran Jurado”. La periodista se encuentra ahora en un hotel, junto a su familia e hizo un llamado a todo el mundo para que continúen su protesta contra el sistema legal estadounidense. Se confirmaron las protestas para el día viernes 25 de enero.
Alfredo Miranda, Washington.
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