Según ha comunicado este miércoles el sitio oficial del Líder iraní, el ayatolá Seyed Ali Jamenei, altos mandos del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI) se reunieron con el líder persa unas horas después del ataque de seis misiles iraníes a las posiciones del grupo terrorista EIIL (Daesh en árabe) en Siria.
En esa cita, agrega la página web, el líder iraní elogió la “excelente” operación antiterrorista de las fuerzas del CGRI, a las que instó a seguir desarrollando el programa de misiles del país persa.
"Trabajen en los misiles tanto como les sea posible", pidió el ayatolá Jamenei. "Ustedes pueden ver cómo el enemigo está obsesionado con los misiles (de Irán), por lo tanto deben saber que su trabajo (con los misiles) es muy importante", agrega el sitio oficial, citando las recomendaciones del líder iraní. "Ustedes pueden hacerlo, trabajen al máximo. El enemigo debe recibir una bofetada", dijo el ayatolá Jamenei.
En la reunión, los comandantes explicaron al Líder el ataque, informándole de que el CGRI había atacado solo las posiciones de los terroristas, sin que ningún civil fuera alcanzado en la operación.
Ustedes pueden ver cómo el enemigo está obsesionado con los misiles (de Irán), por lo tanto deben saber que su trabajo (con los misiles) es muy importante", recomienda el Líder de la Revolución Islámica de Irán, el ayatolá Seyed Ali Jamenei, a los comandantes de CGRI.
El pasado 18 de junio, la División Aeroespacial del CGRI realizó un ataque con misiles desde dos provincias occidentales iraníes contra las posiciones del grupo terrorista EIIL en la ciudad de Deir al-Zur, en el este de Siria, en plena coordinación con el Gobierno del presidente sirio, Bashar al-Asad, en el que se eliminó a más de 170 terroristas, incluido cierto número de altos mandos.
La operación fue una represalia por los dos atentados perpetrados el 7 de junio por el grupo terrorista EIIL en Teherán, capital persa, que dejaron un saldo de 17 muertos y más de 50 heridos.
Teherán ha recalcado que el ataque es el primer paso de la venganza contra Daesh por los atentados de Teherán y que “la gran bofetada está por venir”.
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