• La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, durante una rueda de prensa en Otawa, Canadá, 5 de junio de 2017.
Publicada: domingo, 11 de junio de 2017 5:51

La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, urge la celebración de elecciones presidenciales y la liberación de los “presos políticos” en Venezuela.

La revista estadounidense Time publicó el sábado una entrevista realizada a Bachelet en la que ella confirmó que seguía “de cerca” los acontecimientos en el país caribeño y que veía la necesidad de una “salida negociada” a la crisis surgida entre el Gobierno y la oposición venezolanos.

“La violencia debe terminar. La ley debe ser seguida. Los presos políticos deben ser liberados. El poder constitucional de la Asamblea Nacional debe ser restituido y necesitamos un calendario para las elecciones”, enfatizó Bachelet.

Recordando el llamado al diálogo del Gobierno chileno, entre otros países de la región, reiteró el compromiso de Santiago para poner fin a la coyuntura en Venezuela.

“Chile apoya el diálogo entre el Gobierno y la oposición como la única manera de asegurar que los venezolanos determinen el futuro de su país de manera pacífica”, mencionó.

La violencia (en Venezuela) debe terminar. La ley debe ser seguida. Los presos políticos deben ser liberados. El poder constitucional de la Asamblea Nacional debe ser restituido y necesitamos un calendario para las elecciones”, enfatizó la presidenta de Chile, Michelle Bachelet.

 

Junto a la derecha continental, Chile rechazó la convocatoria a una Asamblea Nacional Constituyente formulada por el presidente venezolano, Nicolás Maduro, para solventar la crisis, y contrarrestar la violencia desatada en el país.

Sin embargo, ha reiterado su llamado al diálogo entre los diversos sectores venezolanos, insistiendo en la liberación de los presos políticos, empero no se han logrado avances significativos al respecto y tanto el Gobierno de Maduro como la oposición siguen responsabilizándose mutuamente de los problemas del país, en especial, los económicos.

En las numerosas protestas callejeras —muchas de las cuales han terminado en violencia— se insiste en adelantar las elecciones presidenciales previstas para diciembre de 2018. De acuerdo con Maduro, el Gobierno es blanco de una guerra económica promovida por Estados Unidos, que junto con la derecha venezolana intenta derrocarlo.

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